Fallece en Panes Santiago Lorido, el último sacerdote ordenado en Asturias - ayto-penamellerabaja
Fallece en Panes Santiago Lorido, el último sacerdote ordenado en Asturias
Tenía apenas 35 años y el pasado 27 de mayo había sido ordenado sacerdote. El último y el único este año en Asturias. Santiago Lorido García, natural de Teverga, fallecía ayer pasadas las nueve de la mañana tras sufrir un infarto en su vivienda de Panes, donde había sido diácono desde diciembre de 2011 y hasta su ordenación como sacerdote, aunque aún seguía colaborando con las tareas pastorales de Peñamellera Alta y Baja a la espera de hacerse cargo a mediados del próximo mes de septiembre de sus primeras parroquias en Grandas de Salime, Oscos y Pesoz.
La noticia fue ayer un golpe para los feligreses de ambas Peñamelleras, que habían compartido con él sus últimos meses de vida, pero también para la Iglesia asturiana en general por el repentino fallecimiento del único cura ordenado en el presente año y el más reciente en la incorporación al presbiterio asturiano. Su capilla ardiente fue instalada ayer en el tanatorio de El Salvador, en Oviedo, y hoy el arzobispo, Jesús Sanz Montes, presidirá el funeral por su eterno descanso a las 11.30 horas en el santuario de Nuestra Señora de Cébrano, al encontrarse en obras la colegiata de Teverga. El sábado, a las 13 horas, se celebrará un funeral en la iglesia parroquial de San Vicente Abad de Panes.
El sacerdote de Peñamellera Baja y Peñamellera Alta, Pablo Luis Gato, se mostraba ayer visiblemente apenado por lo ocurrido ya que su vinculación con Santiago Lorido se remonta más allá de la llegada de ambos a las Peñamelleras, a finales del año pasado. «Habíamos sido compañeros en el seminario, aunque en diferente curso, era una persona muy agradable y sociable, y aquí en Peñamellera cumplió una importante función», destacó.
De ello dan buena fe los vecinos de las Peñamelleras, quienes le recuerdan como un joven «cercano» y «muy integrado con el pueblo», especialmente con los más jóvenes, ya que se encargó de organizar las primeras comuniones. Muestra del cariño que despertó en estos municipios fue que llegó a fletarse un autobús desde Panes para asistir a su ordenación como sacerdote el pasado mes de mayo en la catedral de Oviedo.
El alcalde del municipio de Peñamellera Baja, José Manuel Fernández, comentaba ayer que pese a llevar muy poco tiempo en el concejo «estaba muy integrado en el pueblo, se había adaptado muy bien y era muy cercano y dispuesto a todo». Lo mismo explica Rosa Domínguez de Posada, regidora de Peñamellera Alta, quien trataba ayer de digerir la triste noticia. «Era una persona encantadora, muy jovial y alegre, y con mucha fuerza. Estuvo muy poco tiempo en Peñamellera pero el trato siempre fue correctísimo. Lamento mucho su pérdida y lo siento especialmente por su madre», comentó. Precisamente su madre, Consuelo García, fue quien se encontraba con él en la vivienda propiedad del Arzobispado cuando sufrió el fatal infarto. Varios vecinos trataron de reanimarlo hasta que llegaron los servicios médicos, quienes también intentaron sin éxito de salvarle la vida hasta que sólo pudieron certificar su muerte.
Seminario en 2003
Santiago Lorido era natural de La Plaza (Teverga). Ingresó en el seminario de Oviedo en 2003 donde cursó los estudios eclesiásticos. Hasta el momento de su ordenación como diácono colaboró en tareas pastorales en la zona de Teverga, Santa Bárbara y San Martín de Turón, San Javier de la Tenderina y en San José de Gijón, donde trabajó como voluntario en la Oficina de Información de Transeúnte y en el tanatorio de Cabueñes. Desde septiembre de 2011 estaba vinculado a las parroquias de Peñamellera Alta y Baja, donde siguió ejerciendo tras recibir el orden del diaconado el 11 de diciembre de 2011.
El pasado 27 de mayo fue ordenado sacerdote en la catedral de Oviedo y estaba previsto que el próximo 11 de septiembre tomara posesión de sus primeras parroquias en San Salvador de Grandas de Salime, San José de Brañavieja, Santa María Magdalena de Peñafuente, Santiago de Pesoz, Santo Emiliano, Santa María de Trabada, San Juan de Vitos, San José de Gestoso, Santa María de Villanueva de Oscos, Santa María de Laviarón, San Martín de Oscos, a las que había sido destinado el 27 de junio pasado.