Una buena noticia para endulzar el cierre del año más amargo de los pequeños negocios de Peñamellera Baja. El equipo de gobierno autorizaba esta misma semana un gasto de 10.000 euros para crear una línea de ayudas destinadas a los establecimientos hosteleros y comercios minoristas del concejo afectados por la crisis sanitaria. Con este montante, que se podría modificar si fuese necesario debido a las solicitudes que se presenten, se dividirá en subvenciones de hasta 500 euros por negocio.

La hostelería asturiana, recordaban ayer desde el gobierno local, estuvo cerrada desde el pasado 4 de noviembre hasta el 14 de este mes y, a partir de ese momento, se pudo abrir pero con importantes restricciones que están suponiendo una merma considerable de la actividad. Una mala situación, reconoció el alcalde, José Manuel Fernández (PP), que se vio agravada la pasada semana, después de que desde el Ayuntamiento de Peñamellera Baja instaran a la población a restringir al máximo sus salidas debido a un brote registrado en el concejo. «Queremos echar una mano, dentro de nuestras posibilidades, a los autónomos de los sectores hostelero y comercial del municipio», indicó el regidor.

Las ayudas, que se concederán una única vez, independientemente del número de personas que ejerzan su actividad en cada negocio, está destinado a aquellos locales que tuvieron que cerrar sus puertas durante esta segunda ola de la pandemia. Los interesados podrán presentar sus solicitudes una vez la convocatoria sea publicada en el Boletín Oficial del Principado (BOPA). Estas ayudas se suman a las bonificaciones ya puestas en marcha sobre las tasas de agua, basura y terrazas.

Referencias

El Comercio