Peñamellera Baja es uno de los ocho concejos del oriente que cuenta con financiación con cargo al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia para crear o ampliar sus escuelas de cero a tres. En el caso peñamellerano, la que abrirá en Panes será la primera del municipio, que hasta ahora carecía del servicio. La previsión del alcalde, José Manuel Fernández, es «empezar el año con la escuela en funcionamiento».

Este pasado mes de julio, detalla el también senador, fueron adjudicadas las obras, que rondan los 95.000 euros. La escuela de cero a tres se ubicará en el recinto escolar del colegio público Jovellanos, por lo que no es necesario edificar un nuevo inmueble. «Es una remodelación interior del colegio, que es el mejor sitio», afirma. «Lo importante es que las obras están en marcha. Queremos tenerlas listas lo más pronto posible y que quede todo rematado en el último trimestre de este año», añade el primer edil.

Una quincena de plazas
Por cerrar quedan cuestiones como el servicio de comedor y las ayudas que percibirá el Ayuntamiento por parte del Principado. La estimación es que, por el momento, el centro para bebés cuente con «entre 12 y 15» plazas.

Además de Peñamellera Baja, en la comarca cuentan con fondos europeos para las escuelas de cero a tres municipios como Cabrales, con 325.000 euros que destinan a construir el primer centro de ese tipo en el recinto escolar de Las Arenas. Las plazas serán 31. También en Caravia está previsto implantar por primera vez el servicio, con una ayuda de 170.000 euros para 18 plazas. En Onís, donde tampoco existe hasta la fecha, se consignan 73.316 para 18 plazas. En Parres la ayuda es de 510.000 euros para tres unidades, lo que supone 39 plazas. En Piloña la idea pasa por ampliar en dos unidades -31 plazas- la escuela que ya existe en Infiesto con una subvención de 142.406 euros.

Cangas de Onís, donde también existe escuela, dispone de una subvención de 220.000 euros para ampliarla. No obstante, el proyecto asciende a medio millón de euros, por lo que requiere de fondos municipales. El proyecto supondrá la ampliación de la planta baja del actual edificio, que podrá albergar dos unidades más.

En Ribadedeva también existe la instalación desde doce años, pero nunca llegó a ponerse en marcha. Ahora se consignan 180.000 euros para dos unidades y 31 plazas.

Referencias

El Comercio