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Peñamellera Baja urge mejoras en la travesía de Panes y en el tramo hasta Unquera

Peñamellera Baja urge mejoras en la travesía de Panes y en el tramo hasta Unquera

En Peñamellera Baja vuelve a estar sobre la mesa la demanda de mejoras en la seguridad de la travesía de Panes, una reivindicación reiterada en los últimos años por parte del Ayuntamiento y nunca satisfecha hasta ahora por el Gobierno central, pese a que el proyecto llegó a contar con consignación en los presupuestos generales del Estado. Para el tramo urbano de la N-621 a su paso por la capital peñamellerana existió un proyecto de 1,5 millones en la etapa del cántabro Íñigo de la Serna como ministro de Fomento, con 500.000 euros consignados para 2018 y el millón restante para 2019. El alcalde popular, José Manuel Fernández, indica que con la llegada del PSOE al Gobierno central «hubo un cambio de prioridades» y la actuación nunca se ejecutó, pese a que «era nominativa, no estaba dentro de una bolsa de obras generales».

Dada la falta de respuestas en estos cuatro años, el PP -con mayoría absoluta- presentó ayer en el Pleno una moción que servirá de base para elevar de nuevo las demandas al Ministerio de Transportes. «Queremos mostrar nuestro malestar y rechazo a que se haya dejado sin partida presupuestaria», apuntó el primer edil. Recordó además que en la travesía «este verano hubo más de un accidente». «Tenemos mucha carga de tráfico y es una travesía que no tiene posibilidad de variante», añadió. Hasta la fecha, las únicas obras para mejorar la seguridad fueron las acometidas el pasado año por el propio Ayuntamiento con cofinanciación, consistentes en la creación de una acera de en torno a 250 metros entre el aparcamiento de autocaravanas de La Atalaya y la entrada a Panes. Esa instalación se complementó con nuevas señalizaciones pensadas para reducir la velocidad.

Más allá de la travesía de Panes, el Ayuntamiento reclamará obras en el tramo de la misma N-621 que une el concejo con la localidad cántabra de Unquera, de unos once kilómetros y en el que existe «un problema en el firme». «Pocas carreteras nacionales se ven así», aseguró el alcalde.

Obra de La Hermida
Para la N-621 está en marcha una obra de más de 73 millones de euros, pero concentrados en la parte del desfiladero de La Hermida, paso natural del oriente asturiano a la zona cántabra de Liébana. «Están trabajando en la parte cántabra y a un ritmo muy bajo», señaló Fernández. En la vertiente asturiana, añadió, las obras no son por el momento de envergadura, pues se están llevando a cabo «caños y sondeos». El primer edil carece de información sobre las fechas en las que se producirán cortes, para los cuales será necesario «buscar alternativas».

La previsión del ministerio es que los trabajos concluyan en 2026. Una vez terminados, el resultado debiera ser una carretera más segura y amplia, según el proyecto original.

Referencias

El Comercio